Emprender online no siempre es color de rosa. Todo el mundo vende las bondades de emprender online como esa soñada Jornada Laboral de 4 horas por el libro de Tim Ferris, pero nadie te cuenta lo que te vas a encontrar de verdad, y lo vas a encontrar en este artículo.
Porque sí, emprender online también tiene su lado oscuro, que debes conocer porque una vez que emprendes (ya sea online u offline) la única responsabilidad de tu éxito es tuya.
Esto trasciende más allá de estar durante todo el día con el ordenador y comenzar a buscar clientes de diversas maneras, las cuáles pueden poner a prueba tu carácter además de tu capacidad para mantenerte firme frente al rechazo directo.
El costo financiero de emprender es elevado para cualquier negocio, y en un negocio online, aunque puede resultar más barato, sigue necesitando de cierta inversión. Empezando por gastos básicos de operatividad como los servicios básicos de telefonía móvil e Internet.
Esto sin contar a la necesidad de algunos emprendedores digitales del área del diseño, fotografía, producción de audio o de vídeo, quienes requieren de equipos informáticos de gama media-alta y otros juguetitos junto con suscripciones a diversas plataformas y herramientas para ejecutar sus labores con éxito.
Pero tranquilo que si tu no estas dentro de estos sectores, también te va a tocar pasar por caja si quieres acelerar tu funcionamiento. Herramientas, freelances… Son solo algunas de las cosas que debes tener en cuenta para tu satisfacción personal, porque tarde o temprano tendrás que dejar de hacerlo todo tu, y de usar herramientas gratuitas, para dar un salto si quieres conseguir resultados.
¿Se ve fácil? ¡Absolutamente NO! Y es que se trata de darle un giro rotundo a tu vida para dedicarte a lo que más te gusta hasta convertirte en una referencia dentro del sector. Puede que algunos estén seguros de que emprender online es la mejor decisión porque se encuentran desempleados o no consiguen a llegar a fin de mes con sus ingresos convencionales.
¿Estás seguro de querer emprender online?
Lo que desconocen es el mar tan profundo al que se meten, dónde deben armarse de fortaleza al máximo porque trabajar por cuenta propia puede poner a prueba tu salud física, emocional y sentimental hasta límites inimaginables. Cada jornada laboral puede consumirte hasta el cansancio e impedir que disfrutes de calidad de vida en ocasiones.
Eso si te convertirás en algo parecido a un superheroe pues el emprendedor nunca enferma. Puede caerte un rayo, que toda tu familia coja una enfermedad rara, etc. Pero tu nunca te vas a inmutar ante un simple virus.
¿Por qué? Pues porque si no estás ahí, currando… NO COBRAS.
Son cosas que nadie habla pero alguien debe hacerlo y estoy aquí para eso. Conoce cuáles son las desventajas de emprender online… Esas que crees saber pero nadie te las quiere contar.
1.- Inestabilidad laboral
Emprender online es trabajar de forma completamente independiente. Sé que es redundante pero es una de las desventajas más significativas, debido a que no todos los meses tendrás tú móvil rebosando de notificaciones de ventas. Este aspecto debes considerarlo muy a fondo por las implicaciones que conlleva.
Hay momentos en que no darás abasto con tanto trabajo u otros con tan pocas cosas por hacer, dónde estarás agradecido de recibir una llamada de ese cliente tan pesado con algún requerimiento a satisfacer.
Nadie velará por tus derechos laborales, los límites los pones tú mismo y ni el estado ni nadie va a venir a decirte que no trabajes tanto, o que vas a tener un descuento en tu cuota mensual porque has vendido menos. En estos casos el autónomo, freelance o cualquier empresa, sobre todo cuando inicia, se ve francamente vulnerable.
Fácilmente puedes ser despedido de un proyecto con el total descaro y la menor consideración a nivel profesional. También pueden surgir situaciones incomodas con algunos clientes, quienes querrán pasarse de listos con la intención de obtener algún beneficio adicional a lo acordado inicialmente.
Lo más sensato para evitar este tipo de incidentes es ser lo más claro e intrínseco con el cliente desde un inicio, estableciendo las pautas adecuadas a los intereses de ambas partes y haciendo énfasis en el cumplimiento de las mismas. Hazle firmar un contrato de servicios, dónde se expresen de la forma más explícita a tales condiciones de trabajo y así evitarás abusos o encontrarte en una situación de inestabilidad laboral.
2.- Economía fluctuante
Las condiciones económicas de cada país es otra de las preocupaciones del emprendedor digital. Cada anuncio o situaciones de inestabilidad socio-política pueden cambiar las reglas del juego con facilidad e imponer un nuevo escenario para todos los actores involucrados.
Estos individuos son los clientes interesados en adquirir tus servicios, quienes no darán un paso al frente para concretar negocios. Se abstendrán de hacer inversiones al visualizar cómo van deteriorándose sus finanzas y que las ventas están por el suelo.
Tal hecho hará que no percibas ingresos de ningún tipo durante ciertos periodos de tiempo, lo cual hará que tus ánimos se pongan por el suelo e incluso llegues a un estado de preocupación excesivo. Existirán épocas con tan bajos ingresos que minarán tus ganas de continuar con esa idea de emprender online.
Sin embargo, habrá momentos de extrema abundancia financiera. Aquí es dónde entra el nivel de educación de cada persona, deberás ser lo más cauteloso con tus recursos y darles un uso adecuado con la finalidad de tener algún fondo de reserva en caso de “malas rachas”.
Un claro ejemplo es la situación en vivida hace poco en Cataluña. No vivo allí pero varios clientes sí y han visto como sus ventas bajaron por todo lo que acontece. Esto me repercute directamente, debido a que optaron por cancelar diversos proyectos para finales de año.
Otro ejemplo puede ser la situación de la crisis sanitaria que estamos viviendo ahora. Si ya has emprendido… ¿Cómo te está afectando esta situación?
3.- Jornadas de trabajo interminables
Sabes a qué hora comienzas pero no cuándo terminas. Puede que te levantes a las 5 de la mañana a trabajar en todas tus cosas pendientes y sean las 10 de la noche y tengas más tareas asignadas que cuando empezaste. Esta es una realidad muy común en el emprendimiento digital.
No hay horarios fijos de trabajo e incluso puedes tener jornadas maratonianas en ciertos periodos del año, dónde tienes muchísimo por hacer y estás a tope con los tiempos de entrega. Percibirás tu trabajo como algo interminable y cuándo crees que podrás desconectar por un momento, saldrán más cosas por hacer y te vuelve a absorber.
A fin de cuentas estarás hasta arriba de trabajo, agobiado pero también feliz porque tendrás dinero entrando en la buchaca.
Podrías pasar hasta 20 horas continuas en el ordenador. Recuerda que eres tu propio jefe en todos los sentidos y debes asegurarte de tener todo en orden y al día. Aplazar un trabajo puede tener un costo preponderante en tu tiempo, ocasionándote malos ratos de estrés e impotencia al no poder llevar las riendas de varios frentes.
4.- Poco descanso
Otra de las desventajas más notorias de emprender online es la ausencia de días libres. Tendrás que olvidarte de días feriados o épocas vacaciones, dónde acostumbrabas a salir a farra con amigos durante los fines de semana hasta el amanecer. Los viajes familiares o de ocio deberás posponerlos para dedicarte a tu actividad de lleno.
Los emprendedores digitales casi nunca descansan (Aunque nos quieran vender eso de la jornada laboral de 4 horas). Puede que estén viendo una película con su pareja y suene una llamada de un cliente, el cuál se comunique para informar sobre un posible cambio en el proyecto o algún otro detalle de interés para ambas partes.
Tus sistemas de automatización como los embudos de ventas seguirán activos por las 24 horas del día y los 365 días del año para mantener tu fuente de ingresos. Recibirás mensajes con solicitud de presupuestos o algún antiguo prospecto con necesidad de ese increíble descuento que ofreces en fechas como navidad o el día de tu cumpleaños.
Esto ocasionará que te veas en la obligación de continuar con tus labores de atención al cliente, dejando plantadas a tus personas más cercanas en plena reunión festiva sin justificación alguna. Lo más triste de este caso es el hacerlo porque es tu negocio y sin la certeza de que contratarán algunos de los servicios o comprarán alguno de los productos que ofreces.
5.- Impuestos arbitrarios e injustos
No sé desde donde estas leyendo esto. Puede que vivas en un lugar con poca rigurosidad en temas fiscales o con impuestos irrisorios para emprendedores. Si es tu caso, deberías estar agradecido porque desembolsar dinero de forma constante como emprendedor online es una completa tortura.
España tiene una de las políticas fiscales más severas del mundo para los autónomos. Que si la cuota de autónomo, que si el IVA, que si el IRPF,…
Yo suelo decir que cuando emprendemos vamos a medias con el estado (Al menos aquí en España). Lo que supone una cantidad de dinero considerable que, sobre todo cuando empezamos, pensamos que es nuestra pero NO. Cuando te toquen hacer tus declaraciones trimestrales o anuales, vas a ver que bonito es ser autónomo.
Imagina que factures 48.000€ al año con un enorme esfuerzo y dedicación, dejando a tus hijos sin padres por unas horas e incluso días para atender proyectos de clientes o encargos de extrema urgencia. Ahora hazte a la idea de que te vas a quedar solo con 24.000€. El resto se lo quedará hacienda. Pero es que de lo que a ti te queda, tendrás que pagar tus gastos, herramientas, freelancers que te hagan algún trabajo…
¿Cómo te quedas? ¡Dudo que saltes de alegría! Ahora enfócalo desde la visión de un emprendedor con una facturación hasta un 50% más baja a la que te digo y con tantas necesidades a nivel personal como empresarial.
Esto, mermará nuestra ventaja competitiva respecto a profesionales en países con impuestos más relajados.
Esto es algo que desanima a cualquiera hasta ponerlo por los suelos. Situaciones como esta son el pan de cada día de todas aquellas personas que han decidido emprender.
6.- Rabietas con frecuencia
Tratar con público no es nada sencillo. Cada persona que se comunica contigo porque está interesada en tus servicios es poseedora de un carácter único e inigualable. Puede que congenies con algunos de ellos, debido a que tienen una personalidad muy similar a la tuya y comparten algunos intereses. Otros por ser muy hábiles para relacionarse e imponen un ambiente fascinante en su entorno.
Hasta aquí es algo maravilloso e incluso al enunciado de este punto se lo podrá considerar como algo exagerado. El detalle es cuándo comienzas a tener un flujo de clientes e ingresa todo tipo de personas, las cuáles pueden llegar a ser extremadamente insoportables hasta el punto de mantenerte con un humor de mil demonios.
Sus absurdas exigencias junto con cambios a última hora harán que pierdas la paciencia y puedas perder los estribos en ocasiones. Quién contrata a un emprendedor digital debe entender que no somos esclavos ni estamos a su exclusiva disposición durante las 24 horas del día, como si se tratase de un mayordomo doméstico.
Muchos lo conciben de esta forma, lo cual nos genera una terrible molestia e incomodidad. Si quieres emprender online o ya eres emprendedor te aconsejo que te llenes de fortaleza mental porque realmente es necesaria en ocasiones, donde puede provocar que envíes a alguien a la mierda.
7.- Competencia excesiva
El boom de Internet ha generado que surja un sinfín de nuevos perfiles profesionales según las necesidades actuales de las empresas. Lo que nunca imaginamos es que todos querrían ser parte de ello al punto de la saturación.
No queremos desestimar el fenómeno de la digitalización, el cual ha traído un sinfín de apoteósicos cambios para nuestra sociedad. Sólo que este emprendimiento digital se está convirtiendo en la alternativa de muchísimos desempleados, quienes han visto esta opción como una salida laboral para paliar la crisis económica.
Millones de personas han decidido dar un paso al frente e iniciarse en el mundo de las nuevas tecnologías, donde todo es posible con un simple clic. El detalle es que esto ha generado una competencia desmedida, la cual se aleja muchísimo de la ética profesional e incluso de los buenos valores humanos.
Si decides emprender online es algo que debes tener siempre presente. El servicio que ofrezcas puede ser de extrema utilidad e incluso algo vital para X proceso; Sólo que si no logras destacar por darle algún valor añadido o marcar la diferencia, estarás catapultado al fracaso.
La calidad es importante pero también resulta importante aplicar estrategias de marketing de alto impacto, las cuáles te ayuden a construir una marca personal sólida y posicionarte como la mejor alternativa en tu sector.
8.- Alta inversión
Esta es una de las desventajas más polémicas de emprender online. Los que deciden adentrarse en este mundo digital están convencidos de su carácter económico al ahorrar ciertos gastos de operatividad como alquiler de una oficina física y otros aspectos destacables.
Lo único que suele pasarse por alto es la necesidad de herramientas informáticas, las cuales pueden tener un costo más bajo a los costes mencionados anteriormente pero igual son algo inaccesibles para muchos emprendedores digitales.
En mi caso, ya voy por unos 1.200€ mensuales solo en herramientas para mi marketing online. Y a esto habría que sumar el presupuesto en publicidad.
Además no es sólo adquirir un ordenador de alta gama con ciertos requerimientos para tu actividad. También se le suman desde licencias de acceso a ciertas plataformas hasta campañas de publicidad en redes sociales para darte a conocer entre la comunidad virtual.
Todo esto puede significar miles de euros para el bolsillo de un soñador, quien desea darle un vuelco trascendental a su existencia para vivir como siempre ha querido, pero con pocos recursos monetarios para hacerlo realidad.
9.- Agobio simultáneo
Atender varios asuntos a la vez es parte de la vida cotidiana de un emprendedor digital. Estarás atendiendo a un cliente en videollamada, mientras que estás pensando en el encargo que tienes pendiente de otra persona, el cuál ya te ha pagado y está esperando el trabajo.
Te sentarás a trabajar en una entrega urgente pero seguirás pensando en otros asuntos de vital importancia de tu negocio. Así transcurren los días de los que se atreven con su negocio online y no mueren en el intento. Solemos estar, aunque no queramos, con la cabeza a tope de cosas en todo momento e incluso, cuando estamos en horas de “desconexión” con la familia.
Puede que te llamen para hacer revisiones de un trabajo realizado a la vez que recibes un mensaje de otra persona para un presupuesto o solicitarte algo. Debes gestionar a ambos de una manera eficiente, la cual deje en buen lugar a tus capacidades profesionales.
Al principio es algo que se puede sobrellevar pero llega un momento de colapso, donde lo único que te provoca es tener ganas de coger tus cosas e irte al extremo más austral del mundo para que nadie te encuentre.
10.- Alta incomprensión por tu círculo interno
“Te la pasas sentado en ese ordenador y no tienes tiempo para nada”, “Tú trabajo es muy sencillo”, “Qué sabes tú de cansancio, si no sales de casa”. Estas patéticas e irritables frases son mencionadas de forma constante por las personas más cercanas a nosotros.
A mí me resultan tan chocantes e incomodas al punto de no dirigirle palabra alguna por un tiempo, a quién se atreve a emitirlas. Principalmente porque son una evidencia fehaciente del atraso cultural de nuestra sociedad, dónde aún siguen sin comprender a las bondades de la digitalización o la ahora en auge impuesto «transformación digital».
Tener un negocio online no es sentarse a jugar durante todo el día. Se trata de desarrollar una actividad económica en el ciberespacio, la cuál te permita vivir de ello hasta alcanzar tu independencia financiera. Esto es algo que se debe reforzar de forma constante.
Somos dueños de nuestro propio negocio pero también responsables del éxito del mismo. El hecho de trabajar como autónomo desde nuestra casa, no da ningún derecho a hacer lo que nos da la gana ni a quedar mal con un cliente por estar pendiente de tareas domésticas o jugando con los niños (Que al menos a mi me encantaría).
Se leerá como un pensamiento radical pero es la realidad. Habrá quienes reciban completo rechazo e incluso actitudes burlonas hasta hacerte sentir desubicado por el simple hecho de ser emprendedor digital. Tú no te sientas mal porque sólo tú sabes lo que es mejor para ti y verás cómo tu arduo trabajo será recompensado.
Conclusiones
Creo que ha quedado claro que emprender online o emprender en general, no es tan fácil como muchos nos hacen creer.
Para emprender en internet debes estar hecho de una pasta especial y estar relativamente seguro de lo que haces. Asimismo, debes ser capaz de aguantar la incertidumbre, la incomprensión, etc.
Y no me entiendas mal, como siempre dice mi amiga Elia Guardiola, «EMPRENDER ES UNA MIERDA, hasta que recoges lo que llevas tiempo sembrando, y ni se te ocurra dejar de sembrar» .
Pero si tienes claro tu objetivo, y te propones lograrlo a toda costa pasarás estos malos momentos, o te acostumbrarás a ellos, y empezarás a saborear las mieles del emprendimiento digital.
Pero eso me da para otro post.
¿Te sientes identificado con alguno de estos puntos? ¿Crees que me he olvidado de alguno?
Cuéntanos en los comentarios el momento en el que hayas vivido tu mayor desventaja de emprender online.
Se tenía que decir y se dijo. Estoy totalmente de acuerdo. Entiendo que las ventajas (y el estar un poco tocados de la cabeza :P) al final decantan la balanza hacia el emprendimiento… y cómo mola cuando salen las cosas bien… pero, como dice Èlia (y se lo he escuchado en persona varias veces): emprender es una mierda.
Sobre todo en mi caso, al principio me pesó mucho la incomprensión del entorno, de los amigos y la familia, por eso es ESENCIAL hacerse un grupo de contactos/amigos en la misma situación que nos aporten y enriquezcan en vez de frenarnos.
Un saludo, mola el artículo
Jajaja mil gracias Jonathan. Sabia yo que te iba a gustar 🙂
Para mi también fue (y sigue siendo a veces) muy duro esa incomprensión. Y como dices es crucial poder «desahogarte» con otros compañeros que te entienden porque han pasado por lo mismo.
Y por supuesto que emprender tiene muchas ventajas, que para muchos decantan la balanza hacia el lado del emprendimiento, hablaré pronto de eso jeje
Gracias de nuevo por pasarte por aquí.